Trabajadores sanitarios a la baja
En los datos que ha hecho públicos el gobierno acerca de la evolución del paro (que nos deja cifras inquietantes, ya que sobrepasa los 4 millones de personas), nos llama la atención que el paro en el sector sanitario, en el espacio de estos dos últimos meses (enero y febrero), se ha incrementado en 11.325 personas. Más de 11.300 trabajadores sanitarios que se han quedado sin trabajo.
Los dos meses peores de la tercera ola
No deja de ser sorprendente y desconcertante que durante lo peor de esta tercera ola (que se ha concentrado en estos dos meses), en lugar de tener más personal para cubrir la atención médica de los pacientes, lo que ha hecho Sanidad y las empresas sanitarias es DESPEDIR, en lugar de CONTRATAR.
Y luego dicen que faltan médicos…
No deja de ser paradójico que la excepcionalidad de la pandemia, excepcionalidad que debería haber sido motor de contrataciones de trabajadores sanitarios, siga el mismo ritmo de condiciones laborales que en años anteriores, es decir, contratos precarios y de escasa duración.
Pero las incongruencias persisten, ya que a principios de febrero, Sanidad anunció (tras pasar al paro casi 10.000 profesionales sanitarios), que facilitaría la incorporación a la vida activa a profesionales ya jubilados. Es incoherente que teniendo personas en paro, profesionales válidos esperando una oportunidad, se apueste por incorporar al trabajo a médicos jubilados, los cuales, no dejan de ser un grupo de riesgo ante el COVID-19.
El problema de la temporalidad
La temporalidad en el sector sanitario es un problema que la Administración no aborda con rigor, con ganas de resolverlo. Parece envuelta en el bucle estacional de las vacaciones, cubrir mínimamente y sin garantías de eficacia, el período estival… y vuelta a empezar ¿Es de extrañar el éxodo de estos profesionales a otros países?
Es totalmente irrespetuoso hacia los sanitarios y hacia los pacientes, la escasez de planteamientos serios para resolver este acuciante problema de la Sanidad: La falta de profesionales.